Voto explicativo
El análisis y aprobación del presupuesto municipal es la pieza legislativa más importante que se considera en cada una de las legislaturas municipales cada año. No surge como iniciativa del cuerpo ni de ninguno de sus miembros individualmente. Es un mandato de ley que cada legislatura realiza en representación del pueblo que la eligió para que lo represente en todos aquellos asuntos que le afectan e inciden en su calidad de vida. Es una responsabilidad indelegable de cada miembro contraída con cada elector, independientemente de si votaron o no por él por ella, según sea el caso.
Un presupuesto, como lo indica el nombre, es una proyección que se hace sobre lo que esperamos que ocurra si las circunstancias se mantienen relativamente estables. En este caso, se refiere al comportamiento esperado en materia económica del municipio en cuestión. Como es natural, un presupuesto es un documento asediado por la incertidumbre y condicionado a la ocurrencia o no de unos eventos que nadie controla. Es por ello por lo que reviste tanta importancia realizar el análisis más riguroso y detallado de todos los aspectos, sobre todo en tiempos de estrechez económica como el que vivimos hoy en Puerto Rico.
El pasado 2 de junio, se nos entregaron a los legisladores, los libros y los documentos relativos al presupuesto de ingresos y gastos del municipio para el año económico 2014-2015 cerca de las seis de la tarde en sesión ordinaria. Varios minutos más tarde, se dio inicio a la discusión del contenido de dichos documentos con la participación de parte del equipo económico del municipio y con la presencia del señor administrador.
La presencia de estos destacados profesionales hubiera sido muy valiosa, si los legisladores hubieran tenido antes, el beneficio de una lectura sosegada y profunda de todo el material recibido. Hubieran estado entonces, en condiciones de hacer preguntas y aclarar dudas que, sin duda, hubiera enriquecido el proceso y mejorado el producto final. La concesión de apenas dos horas para la consideración de un presupuesto multimillonario, es simplemente un evento proforma que no cumple con las expectativas mínimas de lo que pretende un proceso como este.
Votar a favor o en contra de algo que no se ha examinado adecuadamente es, a mi juicio, una acción irresponsable, por decir lo menos. Por esta razón, contrario a lo que hubiese sido mi deseo, me vi en la penosa situación de abstenerme ante un documento tan crucial para poder llevar a cabo la obra que nuestro pueblo requiere y merece.5 de junio de 2014